Alimentación Infantil: Frutas

Las frutas constituyen un grupo de alimentos indispensables para la salud y por ello ocupan el segundo lugar de la pirámide alimenticia junto con los vegetales.

Frutas

Frutas

Las principales ventajas de la fruta en la alimentación infantil es que aporta un alto contenido en agua, en vitaminas y minerales, y tiene un bajo aporte en calorías. Contiene fibras vegetales, hidratos de carbono simples y nada de grasas.

Cuándo introducir las frutas:

Las frutas pueden comenzar a ofrecerse como alimentación complementaria, es decir complementando la leche materna o de fórmula, a partir de los 5-6 meses.

Algunas son más adecuadas para ofrecer antes que otras porque tienen un menor riesgo de desarrollar alergias en los más pequeños. Deben ir introduciéndose en la dieta una a una para comprobar su tolerancia y esperar dos o tres días para ofrecer una nueva.

A los 5-6 meses: manzana,pera,plátano,ciruela,cereza y uvas (sin piel ni pepitas). El melón ,la sandía,la papaya y el mango también pueden ofrecerse a los 6 meses. Con respecto a la naranja y a la mandarina hay pediatras que también recomiendan introducirlas a los 6 meses, mientras que otros sugieren esperar hasta los 12 meses por considerar a los cítricos más alergénicos.

A los 12 meses: melocotón,albaricoque y nísperos. Hay quien recomienda las frutas rojas apropiadas para ofrecer a partir del año, sin embargo otros las consideran demasiado alergénicas y las recomiendan a partir de los 15-18 meses.

A partir de los 24 meses: frutos secos.

Tarritos de Fruta Pedialac

Tarritos de Fruta Pedialac

En tu Farmacia Alhucema te ofrecemos los tarritos de fruta ya listos para su consumo. En el caso de Pedialac los purés infantiles siguen un proceso muy similar al que se realiza a nivel doméstico, pero con los cuidados propios de la industria alimentaria que maneja grandes volúmenes de alimentos y que tiene en cuenta cuestiones de control de temperatura, tiempo e ingredientes.

¿ Quién no ha dado alguna vez un tarrito a su hijo? Las prisas, la comodidad, la facilidad de preparación… Además se ha comprobado que los tarritos infantiles tienen las mismas propiedades nutricionales que los purés caseros. El proceso comienza en la selección de las materia primas. Una vez hecho el puré, se realiza un baño maría que garantizará la conservación natural de los tarros, de esta forma no es necesario usar ningún tipo de conservantes ni de colorantes. Y en cuanto a los pesticidas y los plaguicidas, la industria alimentaria lo lleva a raja tabla porque la legislación es muy exigente y más en los alimentos destinados a los bebés.

(Por Lourdes García Torres, Farmacéutica Adjunta)

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